Por un acuerdo celebrado recientemente con China, ese país financiará la construcción de dos centrales nucleares en nuestro territorio (entre otras iniciativas). Esas dos Centrales Nucleares se suman a las tres que ya funcionan en Argentina, una en Córdoba (Embalse) y dos en Buenos Aires (Atucha I y Atucha II). Una de las nuevas centrales se instalará en Lima, Partido de Zárate, provincia de Buenos Aires, en un predio lindero a las Atuchas y se comenzaría a construir a fines de este año. La otra -quinta en Argentina- se ubicaría en la provincia de Río Negro, su construcción será en 2020 y en lugar aún no definido. A todo este paquete se le suma: el traslado de Dioxitek (empresa que fabrica combustible para centrales nucleares) a Formosa, luego de una larga historia de contaminación en Córdoba. La pretendida explotación de uranio en La Rioja, Chubut o Mendoza. Y la generación de residuos de los más tóxicos y persistentes que el hombre haya fabricado y no sabe qué tratamiento darle, más que confinarlos depositados en algún sitio. Está claro que con cinco centrales funcionando, Argentina es un país nuclear. Este plan nuclear, si es que existe como tal, nunca fue puesto en discusión o debate público. Desde Buenos Aires, y a pesar de ya contar con dos centrales funcionando, decimos nuevamente NO a la ENERGIA NUCLEAR. Le decimos NO a exponer a la región más poblada del país al peligro, por generar megavatios que pueden producirse de otras maneras, más baratas y limpias. Sobran razones. NO a la ENERGIA NUCLEAR. Nos sumamos al pedido del Movimiento Antinuclear de Zárate Campana de que se realice un referéndum para que toda la ciudadanía argentina decida si quiere dos centrales más en el territorio.

2017